Siembra semillas de bondad y de amor, pero no te preocupes por los resultados futuros.
Si no tienes el bien que esperabas, o si el beneficio no produjo la gratitud deseada, no te disgustes.
¡ Ayuda y sigue adelante !
Siembra la semilla y deja que crezca y fructifique según las posibilidades del terreno.
Confía en el tiempo.
Mientras tanto, esparce semillas de bondad y de amor por donde pases.
0 comentarios:
Publicar un comentario